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Claves para gestionar el estrés cuando estás opositando

Claves para gestionar el estrés cuando estás opositando

Estudiar oposiciones es bastante complicado y tedioso, por lo que a veces es imposible evitar que el estrés nos supere, bloqueando nuestra mente e impidiéndonos concentrarnos y tratar de retener cualquier tipo de información. Por todo esto es tan importante aprender a gestionar el estrés si quieres conseguir tu plaza y desde Iuris Sanitas queremos ofrecerte algunos de nuestros mejores consejos para ello.

1. Analízate y trata de identificar la situación de estrés

No es raro que a veces no nos demos cuenta de por qué estamos pasando o qué estamos sintiendo exactamente. Hablamos de esos momentos en los que sin motivo aparente todo empieza a sentarte mal o hace que te eches a llorar. Pues bien, esto puede ser provocado por el estrés y la ansiedad.

Y es que ya sea ese momento en el que empiezas a estudiar y te das cuenta de la cantidad de esfuerzo que te queda por delante, el momento en el que sale la convocatoria o esos días antes del examen, son muchos los episodios de estrés que se pueden sufrir cuando estamos estudiando una oposición, por lo que es importante reconocer nuestros sentimientos para pararnos y respirar antes de seguir adelante.

2. Haz deporte

Si tu nivel de estrés es elevado, no vas a poder hacer un ejercicio mental ni cognitivo (memorizar, leer, pensar…). ¿Te está ocurriendo ahora y no sabes qué hacer?  Sal a correr, ve al gimnasio o sube cuatro pisos andando, verás como se te despeja la mente.

3. Conecta con la naturaleza

Algo que puede ayudarte mucho a relajarte, es dar un paseo por el campo en silencio y respirar aire puro puede ayudarte, pruébalo cuando estés estresado, pero lo mejor es que programes salidas frecuentes a la naturaleza o visites algún parque.

4. Dedícate un tiempo de autocuidados todas las semanas.

Puede ser yoga, pilates, meditación… hay personas que se relajan y se cuidan haciendo manualidades o coloreando mandalas. Cualquier actividad en la que te sientas que te relajas, en la que descanses y con la que disfrutes.

Y LO MÁS IMPORTANTE

Reflexionar sobre lo que te ocurre te servirá para determinar el grado de estrés y las acciones que puedes llevar a cabo dependiendo de cómo te encuentres. Si todos estos consejos no son suficientes y sientes que tus niveles de estrés te superan, lo mejor es que consultes con un profesional. Como ya hemos visto, opositar es muy estresante y por eso, no solo hay que estudiar, sino que hay que ser capaz de gestionar el estrés y superar la presión.

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